Espero que a pesar de la lluvia y el frío
hayáis disfrutado del fin de semana. ¿Aprovechasteis mucho el BlackFriday?
Yo sólo compré un par de regalitos de Navidad, me pone un poco nerviosa ir de
compras cuando hay semejante mogollón de gente (a lo que había que sumarle los
paraguas).
También fui al cine, a ver Animales
fantásticos y dónde encontrarlos, sin entrar en detalles: me gustó bastante
(salvo algunos momentos algo crispantes), y me hizo una cierta ilusión que
volvieran a sacar cosas de Harry Potter (aparte del nuevo libro, que
sinceramente prefiero no mentarlo), y el diseño de las criaturas es
impresionante.
Os traigo un postre archiconocido, cuya
receta tiene cientos de variantes, de formas de hacerse y de combinaciones,
pero que todo el mundo disfruta: la mousse de chocolate.
Cuando era pequeña este era mi postre
favorito. Me chiflaba el sabor intenso del chocolate y el crujido de las
burbujitas que sonaba cuando metías la cuchara a día de hoy me sigue
enloqueciendo. No es un postre especialmente ligero, pero su textura sí que lo
es, gracias a una buena dosis de claras a punto de nieve muy bien montadas.
Yo prefiero hacerla con chocolate negro
Valor, pero cuando la preparo para mis primos (como esta mañana) sustituyo
parte (1/3 más o menos) con chocolate con leche, para que resultase más
suave (en ese caso suelo reducir un poco la cantidad de azúcar).
Ingredientes (para unas 4 raciones)
-157 gramos de chocolate
-30 gramos de mantequilla
-4 huevos
-60 gramos de azúcar
Para decorar: unas hojitas de menta, unas
galletas (está buenísima con galletas Digestive) o barquillos, frutos rojos,
nata montada y cacao en polvo espolvoreado, avellanas machacadas…Lo que más os
apetezca o tengáis a mano en casa.
Preparación:
-Derretimos el chocolate negro con la
mantequilla (si vais a hacer parte con chocolate con leche reservadlo). Lo
podéis fundir al baño maría o en el microondas.
-Una vez fundido (añadimos el chocolate
con leche picado en trocitos y removemos hasta que se funda) dejamos que se
temple.
-Separamos las claras de las yemas.
-Añadimos al chocolate tibio las yemas
batidas y removemos hasta que se haya incorporado.
-Batimos las claras a punto de nieve.
Añadimos el azúcar cuando ya estén montadas y seguimos batiendo un poco más.
-Para aligerar la mezcla echamos un par de
cucharadas de las claras al chocolate y mezclamos con movimientos envolventes.
Cuando se hayan incorporado del todo echamos el resto y mezclamos poco a poco
(con movimientos envolventes), con cuidado para que no se nos bajen.
-Podemos refrigerarlo directamente en el
bol o repartirlo en cuenquitos. En todo caso, cubrimos con papel film y
refrigeramos unas 3 horas.
Sacamos cuando vayamos a servirlas y
decoramos
Como he dicho hay muchas variantes de este
postre, ¿a vosotros cuál os gusta? Se aceptan recomendaciones :)
Que empecéis bien la semana chicos y
gracias por leerme.
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