¡Hola!
Me muero porque empiecen las
vacaciones de Navidad, estos últimos días se me están haciendo eternos, y eso
que esta semana tengo más clases de lo normal…en fin, supongo que es el precio
de no haber tenido que ir a la universidad una semana entera, así que tampoco
me puedo quejar ;)
Hoy no tengo mucho que
contaros: estoy entretenida con los trabajos del máster, para poder tener las
navidades más liberadas y que me dé tiempo a hacer todo lo que quiero: ir a ver
Star Wars: Rogue One, Assasins Creed y Moana, leer (que aún me quedan algunos libros de mi último pedido
por Amazon), cocinar… y también descansar un poco.
Os adelanto una noticia ya (para que no se me olvide): la
semana que viene no creo que suba nada el fin de semana, por razones obvias, (son
el 24 y 25)…No lo tengo muy claro, depende del tiempo que tenga, quizás el
sábado 24 suba un postre, pero es posible que no. Sorry chicos :(
Hoy os traigo una receta de
pescado al horno…con una “cobertura de calabaza”. Fue un experimento que
preparé el otro día, y la verdad, me gustó bastante el resultado. El pescado no
se quedó nada seco y como ya os he dicho en alguna ocasión, me encanta la
calabaza.
Ingredientes
(para 2-3 personas)
-Los lomos de una merluza
(gorditos)
-1 cebolla
-1 pimiento verde (grande)
-1/2 calabaza (variante violín)
-1 pellizquito de comino
-2 cucharaditas de salsa de soja (opcional)
-Perejil picado
-Vinagre (lleva unas gotitas)
Preparación
-Precalentamos el horno a 200◦.
-Cortamos la cebolla y el
pimiento en juliana.
-Ponemos la cebolla a pochar en
una sartén a fuego medio. Cuando empiece a transparentarse, añadimos el pimiento. Rehogamos
bien hasta que el pimiento ya no esté crudo. Reservamos.
-Pelamos la calabaza y la
cortamos en rodajas finas. Las ponemos en una fuente para horno con sal,
pimienta y un chorrito de aceite. Horneamos una media hora, hasta que se haya
asado y esté blanda (podemos terminarla en el microondas). Aplastamos la
calabaza hasta obtener una pasta y añadimos el comino, la salsa de soja y unas
gotas de vinagre.
-Salpimentamos el pescado y lo
sellamos vuelta y vuelta en una sartén. Ponemos la cebolla y el pimiento en una
fuente para horno con un chorrito de aceite de oliva. Colocamos encima el
pescado y lo cubrimos con una capa de pasta de calabaza (no demasiado gruesa,
para que no resulte muy pesado).
-Horneamos unos 10 minutos a 200◦.
-Espolvoreamos con perejil y
servimos caliente. Yo lo tomé con una ensalada de mezcla de lechugas con granada
y un poco de vinagre balsámico y aparte de colorido resultó también muy rico.
Que os aproveche.
Dulces sueños y hasta el
domingo. Espero que acabéis bien la semana.
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